Ya en Florencia, hemos dados bien con el hotel, y como veis en internet funciona bien. La pega del día es que yo ando un poco sordo, ya que en el aterrizaje de Florencia por un avión Avro sufrí un dolor de oídos impresionante, el peor momento que he tenido en un avión, y hasta ahora todavía sufro dicho dolor espero que mañana al despertar no persista.
La ciudad bien, quizás esperaba un poco más de ella, el Duomo y la Campanille impresionante, aunque todavía no hemos podido entrar a ningún edificio, porque tras salir de comer en un restaurante pocos lugares permanecían abiertos. Así que mañana será un día movido, a madrugar se ha dicho. Saludos
No hay comentarios:
Publicar un comentario