Hoy se cumple un año del Camino de Santiago que hice con mi hermano desde Ponferrada, un año de aquellos días largos de caminar, como ese 17 de agosto en el ascenso a O Cebreiro que jamás olvidaré por lo que me costo llegar hasta la cima. Una experiencia única, que dentro de poco volveré a repetirla.
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jueves, agosto 16, 2012
sábado, julio 28, 2012
Un pasito más cerca
Bueno ya tenemos alojamiento cuando lleguemos a Santiago de Compostela con nuestras piernas doloridas, y nuestro pies machacados, volveré donde tambien descanse el año pasado, el San Francisco Hotel Monumento, que se encuentra justo al lado de la Catedral de Santiago.
lunes, julio 23, 2012
A Santiago iremos!!
Así es, en septiembre vuelvo!! pocos días después de completarse el año de mi primera peregrinación a Compostela. Ahora falta prepararse y equiparse bien para que no pase como la anterior ocasión, tengo que volver en el mejor estado posible para el inicio de la temporada de la 10kBcn.
Enviado desde mi dispositivo BlackBerry® de Orange.
sábado, julio 21, 2012
¿El camino again?
Dicen que el Camino de Santiago acaba llamandote, ya lo hice año pasado, donde por motivos laborales mi mujer no puedo acompañarnos a mi hermano y a mi, cuando ya estaba todo planeado. En esa ocasión realizamos el camino desde Ponferrada pasando por la variante de Samos, ocho días largos, donde el calzado no me acompaño demasiado. Este mes de septiembre puede repetirse el viaje, con mi mujer, pero en está ocasión desde Sarria, a menos días, menos kilometros. Está semana se decide todo, se siente la llamada de Compostela.
martes, agosto 23, 2011
Crónica Etapa 8: Pedrouzo - Santiago de Compostela
La etapa final, asi lo habiamos decidido, no quedaba nada para llegar a Santiago de Compostela, unos 20 kilometros desde Pedrouzo, asi que salimos mi hermano y yobien temprano, en el bosque solo alumbraban las luces de los frontales de los peregrinos, que a primeras horas de la mañana me pasaban como coches por la autopista para el ritmo que llevaba yo xD. Suerte que no tuvismos que andar mucho para llegar a una cafeteria, donde estaban los jubilados alemanes que andan cuatro kilometros al día, preprandose unos deayunos que alimentarian a cinco personas. Ya con el deposito lleno la cosa cambio, ahora ya tenia ritmo para alzancar y sobrepasar a algunos peregrinos, mientras nos acercabamos a Monte do Gozo comenzó a lloviznar, al principio nada, pero poco a poco empezaba a ser preocupante el tema. Alcanzamos a un señor que se nos escapaba cada vez que lo intentabamos
alzanzar en las subidas, con él paramos en un ba a comprar algo de líquido, para ponernos los
chubasqueros y capelinas tranquilamente. Ya llegando en el Monte de Gozo,
donde esta la escultura hicimos un sprint para ver quien llegaba antes,
cosa que por supuesto perdi yo, tenia todas las de perder xD.
Yo en Monte do Gozo
Solo quedaban bajadas, y Santiago quedaba enfrete de nosotros, pasamos a los 27 de Santa Irene, a saber a que hora habian despertado ese día tambien, porque el
ritmo que lleban era de 3 km hora por lo menos, y empezamos a encontrar a
compañeros del camino como Sandro. Ya en la calles de Santiago
acabamos con el grito de los italianos, los de Villafranca del Bierzo, que iban
cantando. Al llegar ya al tramo final, solo los dos, la plaza del obradoiro
nos estaba epserando a ritmo de gaita, así es como complete mi primer Camino de Santiago, una experiencia única.
Yo (izquierda) y mi hermano (derecha) en la Plaza del Obradoiro
lunes, agosto 22, 2011
Crónica Etapa 7: Melide - Pedrouzo
Iniciabamos nuestro séptimo día de camino, salimos de Melide
bien temprano, cuando todavía no se veian las marcas del camino,
algunas incluso tapadas por los coches de la que gente que había venido a
las fiestas del pueblo, los cuales estuvieron haciendo ruido toda la
noche. El Sr. Rafael nos dejaba la noche anterior, nos dijo que el
camino lo continuaría más lento, con más calma, y por otro lado José
necesitaba dormir algo más, el pulpo indicaba el final del equipo, la
compañia era de dos, asi que salimos mi hermano y yo solos.
Yo bebiendo en la fuente de Raído
El camino se hizó sencillo, algo apurado por la calor, que necesitaba de vez en cuando algo para refrescarme, pero dentro de la normalidad. Cuando llegamos a Santa Irene, con 30.76 kilometros ya recorridos ese día, nos encontramos con el grupo tan famoso del albergue de Melide que habían salido a las tres de la mañana, un grupo formado por 27 personas, que habían decidido parar en un albergue que tan solo disponia de 35 plazas, así que lo dejarían completo. Lo que nos jodio a mi hermano y a mi, es que dijerán que todavía no estaban todos, que faltaba un grupo con los niños por llegar pero que tenían la plaza guardada, al igual!! el último que llega se la come, si no llegas antes que otro peregrino no puedes reservar lugar, todos somos iguales en el camino, y todos vamos justos de fuerzas.
Fuente en Santa Irene
Lo peor de Santa Irene es que era un lugar que no tenía nada cerca, con un restaurante apartado, así que llamamos a José para conocer cual era su situación. Allí estuvimos esperando hora y media, pero no aparecia, y veiamos como desfilaban los peregrinos hasta el siguiente pueblo pasado Santa Irene, Pedrouzo, así que cansados de esperar decidimos avanzar. Era demasiado tarde, no sabiamos donde estaba el albergue, era una situación como Pekin Express buscando la bandera, parejas de mochileros buscando el albergue. Cuando llegamos al municipal nos dijeron que tan solo habia una plaza, sino deberiamos ir al polideportivo, cosa que no me atraia mucho la idea, así que nos alojamos en la Porta de Santiago, albergue privado, que nos costo 10 euros a cada uno, pero con unas instalaciones muy correctas, y donde pudimos descansar bien.
Alli nos acomodamos, duchamos, y comimos en el restaurante que quedaba justo enfrente del albergue. Supimos que José mientras caminaba hacía Pedrouzo se cruzo con Rafael, y que había continuado el camino hasta Santiago Compostela. José por su lado consiguió una plaza en el albergue municipal, ya que muchos peregrinos abandonaban este después de ducharse, animados quizás con las cercania a la que quedaba Monte do Gozo o Santiago de Compostela. Tambien supimos que nuestro amigo Miguel habia continuado el camino desde Portomarín a Airexe. Nosotros pasamos alli la tarde, en un pueblo más grande de lo normal, pero no tanto como Melide. Así que esa tarde fué la de los reencuentros con la gente que nos habiamos cruzado durante esos seis días en el camino; los chicos de Zamora, Adam, el chico de Badalona que llevaba a su perrilla, Joaquin "el peregrino de la niebla", etc.Sobre las siete de la tarde me llego el sms de Rafael, ya estaba en Santiago, 50 km en un día. A nosotros nos tocaba descansar para la última etapa, tras habernos clavado en ese día 33.50 km.
domingo, agosto 21, 2011
Crónica Etapa 6: Airexe - Melide
Cada día nos depertabamos antes, la pasada noche tuvimos problemas para
dormir, los nuevos peregrinos no estaban dados a la convivencia de la
vida del peregrino, ya que a las 22.30 de la noche seguian preparando
mochilas, haciendo ruido en la habitación, jugando a cartas, asi que
debimos imponernos un poco, apagando la luz y mandando a dormir a todo el mundo. Al depertar sorpresa, tormenta, no llovia en la zona pero los
relampagos alumbraban todo el campo, asi que decidi
poner el protector de la mochila y dejar el chubasquero en un lugar
cercano por si acaso. Iba muy tocado, como cada día, y ese dia iba terminar peor, ya os
contare.
Avanzamos
los cuatro, yo el ultimo como siempre, no podia alcanzarlos, tenia que desayunar ya!, meterle algo al cuerpo, recuerdo que
esa mañana solo me comi una barrita de cereales nada mas salir del
albergue, pasarón ocho kilometros hasta llegar a Palas de rei, al fin
desayuno!. Mi cafelito con leche, tostadas de pan de molde :( con
mermerlada, y por supuesto el ibuprofeno. El camino no era complicado, y
ahora si ya empezaban a funcionarme las piernas, ademas hoy teniamos
recompensa al final de la etapa, pulpito.
Yo (izquierda) y mi hermano (derecha) entrando en A Coruña
Ya era habitual encontrarse con grupos de peregrinos en vez de peregirnos indivuales, y sobretodo encontrarse con los turigrinos, con esas mochilitas solo cargadas con agua, que agotaban a la mas minima. Mientras más kilometros más cerca estabas de Melide se notaba mucho la afluencia de peregrinos, quizás sea una de las etapas más bonitas por paisajes verdes, pero se estropea al andar junto tanta gente, demasiada, se perdia la magia de las anteriores etapas.
José (izquierda) yo (derecha) en los últimos kilometros antes de llegar a Melide
Nos habian comentado unos peregrinos que ese fin de semana eran las
fiestas de Melide, vaya suerte la nuestra para descansar, y lo peor es que casi todo el mundo que nos ibamos
encontrando por el camino tenia el proposito de quedarse alli esa misma
noche. Avanzando, psaamos el camino por donde habian fuentes, al fin! Los ultimos kilometros se hacian pesados, pero una
vez entramos en el pueblo y vimos las pulperias la cosa se animo, ahora
habia que encontrar el albergue municipal al cual cuando llegamos habia
un monton de mochilas, el primero que veia tan repleto, por suerte
tuvimos sitio.
sábado, agosto 20, 2011
Crónica Etapa 5: Ferreiros - Airexe
La salida de Ferreiros fue temprano, como de costumbre, el grupo habia crecido se nos habia unido el Señor Rafael que habiamos conocido en Samos, en el albergue del monasterio. La señora del alberque nos dijo el día anterior que el restaurante cafeteria que quedaba un poco más abajo, siguiendo el camino, abria a eso de las cinco de la madrugada, pero cuando nosotros llegamos, que seria las cinco y media aquello estaba cerrado, así que todos los peregrinos que salian de Ferreiros con el estomágo vacío se lo encontrarian así. No quedaba otra proseguir el camino, yo iba atras comoe ra típico, mientras ellos cuatro iban avanzando, pero Miguel iba muy tocado del día anterior, se habia resentido su rodilla, y su pie lo tenia tocado. Al cabo de tres o cuatro kilometros encontramos un albergue con cafeteria, un lugar muy comodo para alojarse, lástima de no haberlo sabdio antes.
Alli mientras desayunabamos Miguel decidio que no seguia con nosotros, que buscaria la forma de unirse con nosotros en Melide o en Airexe, pero que iba a ir al medico en Portomarin para que le valorará como estaba. Así que aquí se quedo la compañia reciente que se había formado de cinco peregrinos en cuatro de nuevo, al igual que cuando se nos unió José en el tercer día y dejamos atrás a Roger. Nuestro camino continuaba, las piernas empezaban a coger ritmo, aunque el brazo ya me dolia de llevar el bastón. Al llegar a Portomarin vimos que el rio Miño estaba seco, o es que tenian cerrada una presa por que estaban haciendo algo, lástima, hubiera sido una estampa digna ver el río en su esplendor con Portomarín de fondo. Tras cruzar el rio llegamos al pueblo, donde tomamos un pqueño descanso comprando provisiones para el camino en un supermercado, y después continuamos, aunque desviado del camino, ya que el puente pequeño estaba cerrado porque estaban haciendo obras al otro lado del rio. Así que cruzamos por el puente de los coches, quiza fue un desvio de 800
metros, superado Portomarin, el objetivo para nosotros desde el dia que
planeamos el camino para mi hermano y para mi en esa etapa, continuamos
en dirección Airexe.
El nuevo equipo en Portomarin; de derecha a izquierdas: Emilio, yo, Rafael y José
Yo (izquierda) José (derecha)
El camino era sencillo. poca cuesta, habían tramos que pasabamos cerca
de la carretera, y que habia que cruzarla, cosa que a los conductores
les da igual, luego pasan los accidentes, auqnue claro eso es culpa
tambien de la Xunta, porque de algo que sacan tanto dinero lo podian
tener mejor acodicionados. Al pasar por el kilometro 84 nos tomamos una
foto José y yo, en honor al año en el que nacimos.
Continuamos y ya estabamos rozando los 26 kilometros de etapa asi que buscabamos un lugar para quedarnos a dormir y descansar, pero decidimos llegar hasta Airexe que habia un albergue municipal, vimos unos cerca, pero eran las 13.15 y no habian abierto, ni creo que lo hicieran ya, asi que proseguimos, tuvimos que apretar detras nuestro venia un grupo de nueve personas que si iban como nosotros de fuerzas iban a llenar el albergue, allí es donde le di un repaso no intencionado a un ciclista, ya que no podia subir una cuesta y yo me adelante en un sprint con mochila a la espalda para preguntar por el albergue, ya podreís imaginar con la cara que se quedo el tio de la bicicleta ... xD. Asi es como llegamos a Airexe, un pueblo con su albergue y su restaurante, y una etapa a nuestras espaldas de 26.92 km.
Comiendo en Airexe
viernes, agosto 19, 2011
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